UN CÉSAR EN EL COLOSO
- Rafael Herrera Paz
- 5 oct 2021
- 4 Min. de lectura
Era el año de 1993, México pasaba por un momento clave en su historia, estaba a unos meses de una elección presidencial que pudiera cambiar el rumbo del país y un año antes se había firmado un tratado económico con Estados y Unidos y Canadá que sin duda tuvo profundas consecuencias visibles hasta el día de hoy.

Julio César Chávez ya era una leyenda del boxeo mexicano y considerado uno de los mejores boxeadores en la historia de este deporte. Su rival, el estadounidense Greg Haugen había retado públicamente al mexicano desde un año atrás, en pleno ring de Las Vegas, cuando Julio César festejaba su triunfo, subió Haugen y dijo que el mexicano estaba invicto porque “había peleado contra puros taxistas de Tijuana”; a lo cual Chávez respondió: “Te voy a arrancar la cabeza”.
De tal manera que el 20 de febrero de 1993, el Estadio Azteca era el escenario ideal para enfrentar no solo a dos boxeadores, sino a dos naciones que tenían una larga historia de amor y odio: México y Estados Unidos de Norteamérica.
Mientras la gente llegaba al “Coloso de Santa Úrsula”, Julio César se encontraba en los vestidores que también usa la selección mexicana de fútbol, ¿Qué estaría pensando? Quizá su mente lo llevaba a su natal Ciudad Obregón, Sonora, o cuando peleó contra Andrés Félix por doscientos cincuenta pesos, hecho que marcó su debut como profesional. Al salir al ring, Haugen, quien para entonces ya se había convertido en el gran odiado de la afición mexicana, salió al ring con las notas de la canción de Bruce Springsteen “Born in the USA”, lo cual provocó un tremendo abucheo de parte del público; abucheo que se convirtió en euforia cuando escucharon el mariachi en vivo interpretando el “Cielito Lindo” que marcaba la entrada al ring del campeón Julio César Chávez. No podía ser más emblemático: el rock estadounidense contra la música tradicional mexicana, el mariachi.
En su caminar por la cancha del Estadio Azteca el público recordaba el primer campeonato de Chávez por el Consejo Mundial de Boxeo en el peso super pluma en contra de su compatriota Mario “Azabache” Martínez en Los Ángeles California. Título que refrendo por nueve ocasiones, ganando a Roger Mayweather, Rocky Lockridge, Danilo Cabrera, entre otros. Sus eventos fueron en Los Ángeles, Las Vegas, Francia y distintos lugares de la República Mexicana. Al llegar al ring y escuchar las indicaciones del referí, Julio César Chávez calentaba viendo al inmóvil Haugen que solamente lo veía fijamente. La historia estaba a punto de escribirse.
Julio César también había sido campeón de Peso Ligero, lo logró en 1987 ante Edwin Rosario en Las Vegas, por la vía del Knock Out; ese título lo refrendó en tres ocasiones para convertirse en campeón del peso Super Ligero. El primero fue contra Roger Mayweather en Los Ángeles, California y justo el combate en el Estadio Azteca, era su décima defensa del mismo. El camino no había sido fácil, de hecho, en 1990, Meldrick Taylor en la ciudad de Las Vegas, había obligado a Julio César Chávez a emplearse al máximo, hasta conseguir noquearlo en el último round. Se dice que de llegar a la decisión, el mexicano hubiera perdido su invicto y su campeonato, esa fue quizá su victoria más dramática.

Durante la pelea contra Haugen, Chávez demostró porque era el campeón invicto y una leyenda del boxeo mexicano, jamás hubo una competencia real, el estadounidense recibió golpe tras golpe por cinco largos rounds parra él, hasta que en el quinto, el referí decidió decretar el Knock Out. Julio César Chávez fue contundente todo el combate y cada que acertaba un golpe gritaba “tenga pa que se entretenga”. Al final Haugen reconoció la calidad del mexicano y Julio César salía vitoreado por más de cien mil mexicanos que asistieron al Estadio Azteca.
Después de esa pelea, “el guerrero mexicano” defendió su título en distintas ocasiones e intentó ganar también en el peso Welter, aunque se le negó contra Pernell Whitaker con un empate a finales de ese año y después contra Oscar de la Hoya con una contundente e histórica derrota en 1996. Lo intentó una vez más en 1998 contra el mismo de la Hoya pero fue una nueva derrota. Chávez, el gran campeón mexicano decidió retirarse en el 2005 y su récord final fue sorprendente: 107 victorias (85 de ellas por Knock Out), 6 derrotas y 2 empates. Una de las carreras más sorprendentes en la historia del boxeo mundial.[1]
Chávez también tiene algunos récords que son sorprendentes y al parecer imbatibles:
- Tuvo 31 peleas de Campeonato Mundial que es un récord vigente en el boxeo mundial.
- La asistencia más grande a una pelea con 132 274 aficionados en la noche mágica en el Estadio Azteca.[2]
Aquel día en el “Coloso de Santa Úrsula”, Julio César Chávez, con su característica cinta roja en la frente, regaló una alegría al pueblo mexicano en medio de la turbulencia de aquellos años. Apenas unos meses después, el 1 de enero de 1994 aparecía el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, hecho que conmocionaría la consciencia nacional y el 23 de marzo de 1994 sería asesinado Luis Donaldo Colosio, candidato del PRI a la presidencia de la República. La pelea del César fue justo en medio de una época clave para nuestra historia reciente. [3]
[1] Para las estadísticas de Julio César se consultó https://boxrec.com/en/proboxer/8119. Consultada el 23/sept./2021. [2] https://www.eluniversal.com.mx/universal-deportes/box/julio-cesar-chavez-10-datos-de-la-leyenda-del-boxeo. Consultada el 23/sept./2021. [3] Para datos biográficos de Julio César Chávez se consultó https://www.buscabiografias.com/biografia/verDetalle/208/Julio%20Cesar%20Chavez. Consultada el 23/sept./2021.
Comments